La conexión de los Cuencos Tibetanos con los 7 planetas y las 7 letras dobles del árbol de la vida

03 octubre 2021

Recuerdo un momento especial, en aquellos días y jornadas intensas de sesiones grupales e individuales relativo a mis estudios de Sonoterapia, cuando al finalizar una armonización sonora grupal de cuencos tibetanos, me encontraba en un estado de relajación profunda y es cuando escucho: “Están hechos de 7 metales cada uno de ellos de los cuales simboliza un planeta: oro (Sol), plata (Luna), mercurio (Mercurio), hierro (Marte) plomo (Saturno), estaño (Júpiter) y cobre (Venus). Era mi maestro Ramji quien nos trasladaba estos conocimientos. Para mi fue toda una revelación ya que en esa misma época estaba totalmente volcado e iniciándome en el estudio de la Cábala. Y es aquí donde convergen y se bifurcan estas sabidurías y encuentro una analogía muy significativa entre ambas.

El Sefer Yetzirá el libro más antiguo y misterioso de todos los textos cabalísticos dice en el capítulo uno: 22 letras fundamento, son llamadas fundamentos porque fue mediante las letras del alfabeto hebreo como el universo fue creado, según la mística hebrea. Se puede decir que estas 22 letras se dividen en tres grandes grupos: Tres Madres, Siete Dobles y Doce Elementales, no es mi intención en esta primera toma de contacto, desarrollar y explicar en profundidad todos estos conceptos de la cábala que requeriría un texto mucho más extenso y profundo, pero si que me voy a detener en estas siete letras dobles, que son: Bet, Guimel, Dalet, Kaf, Pei, Resh y Tav, y aquí el secreto revelado, estas siete letras se llaman dobles porque pueden pronunciarse de dos maneras diferentes y representan 7 planetas que son respectivamente: Saturno, Júpiter, Marte, Sol, Venus, Mercurio y la Luna. A su vez cada una de ellas representa una virtud: sabiduría, riqueza, semilla, salud, dominio, paz y gracia.

 

Los senderos de las 7 letras dobles entre las diferentes dimensiones en el árbol de la vida

 

Bet: jojmá-jesed

La letra Bet representa la energía de la sabiduría.

Guimel: biná-guevurá

Guimel es la energía de la riqueza del amor.

Es la energía que comprende cómo transformar la materia en energía, y la energía en materia. Es la energía que compensa el desequilibrio de dos fuerzas que se enfrentan.

Es la energía que supera las contradicciones del bien y del mal. Es más que la madurez intelectual, es la energía de la madurez general de toda personalidad.

Dalet: keter-tiferet

Dalet representa la energía de la procreación o, dicho de otra manera, de la semilla.

Dalet significa en hebreo “puerta” y davar “palabra”. Por lo tanto, es la puerta que se abre a través de la palabra. Este sendero se encuentra en el centro del árbol de la vida y allí es donde encontramos la semi-dimensión de daat (el conocimiento). ¿Y que es el conocimiento (daat) sino una puerta que se abre a través de la palabra?

Kaf: jesed-netzaj

Kaf aparece como la energía de la salud.

Representa la energía de manifestar nuestro propio potencial interno. Es la energía para terminar las cosas que hemos comenzado. Es la fuerza que debemos tener para concluir un proceso y darlo por finalizado. Esla energía física que desea dominar la materia. Debemos luchar para llegar al final, sin obstinación, pero con voluntad, buscando las diferentes estrategias que me permitan alcanzar el final del proceso.

Pei: guevurá-hod

Pei es la energía sobre el poder o el dominio.

Representa la energía que determina el momento de hablar y el momento de callar. La energía para conocer el momento exacto en donde tenemos que frenar nuestras palabras y callar. La energía de la pei es la energía de lo que se dice y de lo que se silencia. Mi persona (mi yo) se define por lo que digo y por lo que silencio.

Reish: tiferet-yesod

La letra Reish representa la energía de la paz interna y externa.

A través de la rectificación y controlando nuestro propio ego, alcanzamos el equilibrio interior. Y logramos el liderazgo cuando poseemos nuestro propio equilibrio personal. Porque el liderazgo es ser el líder de nuestra propia vida.

Tav: yesod-maljut

La letra Tav es la energía del mejoramiento de la personalidad.

La Tav es la energía de nuestra confianza en que, pese a nuestra pequeñez y finitud, somos capaces de avanzar hacia el infinito, donde nuestro trabajo por más pequeño que sea desde nuestro aporte finito busca siempre la trascendencia.

 

 

Que interesante es ver la construcción de estas siete letras, sus atributos, su vinculación con cada dimensión del árbol de la vida y como nos conectan con nuestro sistema astral de planetas. Estas son sólo unas de las tantas cualidades y correspondencias que nos enseña el Sefer Yetzirá.

Retomando la analogía con los cuencos tibetanos y las siete letras dobles, me da lugar a pensar que, a través de la vibración de los cuencos, o porque no llamarlos KLI (vasija, recipiente) podemos iniciar una rectificación operando en conjunto y de manera coordinada en las diez dimensiones, creando una vasija que pueda tanto dar como recibir. En último término dicha vasija es el ser humano. Si la persona va a recibir la luz del creador primeramente debe parecerse a el haciéndose dadora.

Augusto J. Marchetti

Fuente: Sod 22. Mario Saban, Sefer Yetzirá. Aryeh Kaplan